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No es lo Mismo Pedir que Desear.

¿Alguna vez te has detenido a pensar cuántas veces has pedido algo sin realmente desearlo? La diferencia puede parecer sutil, pero te sorprenderá saber como estos dos enfoques pueden cambiar dramáticamente la manera en que experimentamos nuestra realidad.


Pedir y desear, aunque a simple vista puedan parecer similares, generan un impacto distinto en nuestro cerebro y en nuestra realidad. Cuando pedimos algo, estamos admitiendo, inconscientemente, una carencia. Es como si estuviéramos enviando una carta al Universo expresando que no tenemos eso que pedimos y que esperamos que algo externo a nosotros nos lo dé. En cambio, cuando deseamos algo, comprendemos que no estamos limitados por la necesidad de que alguien más nos lo proporcione. Reconocemos que poseemos la capacidad de lograrlo por nosotros mismos.


Si nos quedamos atrapados en la mentalidad de pedir, nos limitamos a esperar que algo externo nos otorgue lo que queremos. Pero si adoptamos la mentalidad de desear, nos damos cuenta de que somos los principales agentes de cambio en nuestras propias vidas. De esta manera, no solo deseamos, sino que actuamos para hacer nuestros sueños realidad.


Esta disyuntiva entre pedir y desear pone contra la pared el primer paso de la conocida Ley de la Atracción. Esta supuesta Ley Universal nos invita a pedirle al Universo lo que queremos y al hacerlo, ahora comprendemos que nos posicionamos en un lugar de dependencia. Dicho en otras palabras, dependemos de que el Universo nos lo otorgue para poder obtenerlo.


Aquí es donde mi método Sintonización Cuántica cobra un gran protagonismo. Este revolucionario enfoque nos permite sintonizarnos con la frecuencia de la realidad que deseamos. En lugar de esperar pasivamente que el Universo nos dé lo que queremos, pasamos a ser los arquitectos de nuestra propia realidad.


En Sintonización Cuántica, no nos conformamos con pedir al Universo; vamos un paso adelante y utilizamos el deseo como una poderosa herramienta para crear la realidad que queremos vivir. El deseo es la semilla que sembramos en el campo cuántico y que genera la línea de tiempo donde ya existe eso que deseamos, y luego buscamos sintonizar con la frecuencia vibracional de esa línea de tiempo alternativa.


Al comprender que esa realidad deseada ya existe y que solo debemos sintonizarnos con su frecuencia de vibración, abrimos la puerta a la manifestación de nuestros sueños. Al abandonar la mentalidad de carencia y adoptar una mentalidad de abundancia, transformamos nuestra energía y elevamos nuestra vibración para alcanzar lo que deseamos.


Prepárate para embarcarte en un viaje de descubrimiento personal con el taller de Sintonización Cuántica, donde aprenderás a manifestar tus deseos más profundos y a conectarte con la energía cuántica que impulsa el universo. ¡No te pierdas la oportunidad de transformar tu vida y alcanzar tus metas de una manera totalmente nueva y emocionante!


Gracias por leer este artículo y recuerda,

el futuro que deseas ya existe y está esperando por ti.


Te mando un abrazo virtual cargado de buena energía.

Daniel López de Medrano

Escritor, Conferencista & Podcaster